Seguimos con la saga de recetas fáciles, ricas y que gustan a todos los habitantes del hogar.
Personalmente, el pollo es una de las carnes que desde pequeñito me han gustado y mucho. De hecho, mi madre tenía la cariñosa costumbre de por nuestro cumpleaños ponernos a cada uno la comida que más nos gustaba, la mía siempre era el pollo con patatas. En casa, dado que a la mayoría de los hermanos lo que más nos gustaba eran los muslos necesitábamos casi pollos contrahechos y que tuvieran cuatro o seis patas…